Por norma general, la falta de tiempo y planificación, unidas a cierta aversión muy común en muchas personas, hacen que las citas con el dentista se retrasen hasta hacerlas inevitables por causa de algún dolor de muelas u otro problema de salud bucodental.
La frecuencia mínima para realizar visitas al dentista debería ser una vez al año, aunque lo ideal sería acudir cada 6 meses. La caries y el sarro no se desarrollan rápido si se lleva una higiene bucodental adecuada (compréndase lavarse los dientes tres veces al día tras cada comida, no comer demasiados dulces, etc.) pero algunos factores como la genética, fumar o beber alcohol o comer entre horas aumentan el riesgo de padecer alguno de estos problemas, muchas veces casi sin que los pacientes se den cuenta. Las personas que padezcan periodontitis o gengivitis sí deben acudir al dentista cada 6 meses para una limpieza bucal.
Como siempre se ha dicho, más vale prevenir que curar. Al contrario de lo que muchos podrían pensar, las visitas regulares al dentista sin duda son un ahorro económico. El precio de una visita de control o de una limpieza es mucho más bajo que el tratamiento de una caries avanzada, mucho más si esa caries se complica y acaba necesitando un empaste o incluso la extracción de la pieza dental y la consiguiente incorporación de un implante dental. La Seguridad Social española cubre muy pocos casos de higiene bucodental, sólo los de extracciones de piezas dentales dolorosas, situación que por supuesto queremos evitar a toda costa.
La mala salud bucal puede ser un síntoma de otra enfermedad mucho peor como problemas cardiovasculares, enfermedades respiratorias, cáncer o diabetes. Por tanto, ir con frecuencia al dentista también puede ser una buena forma de detectar un problema de salud grave en sus inicios, permitiéndonos actuar en consecuencia.
Hoy en día la visita al dentista es mucho menos molesta que antaño. Las técnicas han avanzado mucho y gracias a anestesias locales y a instrumentos muy precisos es posible realizar un correcto mantenimiento bucal con la mínima incomodidad posible.
Los pacientes que padezcan algún problema bucodental no deben dudar en acercarse a una de las clínicas dentales en Sevilla. Estas clínicas cuentan con profesionales serios y muy preocupados por sus clientes que harán todo lo posible para que no sientas ningún dolor durante el tratamiento. El sector de la periodoncia en Sevilla cuenta con una gran reputación dentro de Andalucía gracias a sus equipos de dentistas.